Tim Burton, Wynona Ryder y Michael Keaton fueron grandes figuras y muy representativas de los años ochenta. A Burton por su lado, hasta la fecha, se le sigue guardando respeto por sus grandes obras maestras como Edward Scissorhands, The Nigthmare Before Chritsmas, Vincent, Beetlejuice y probablemente la mejor película de su vida Big Fish. Sin embargo desde ésta última parece que ya no tiene nada que decirnos, haciendo sólo obras ya escritas por alguien más como Swanney Todd o la peor película de su carrera Alice in Wonderland. Por otro lado tenemos a Winona Ryder, que aunque ha demosrado ser una de las mejores actrices de Hollywood, quizá desde Inocencia Interrumpida, no ha hecho nada que sea relevante en su carrera. MIchael Keaton, grandioso actor, pero de igual manera quizá desde Jackie Brown a cargo de Quentin Tarantino ha sido olvidado y guardado en los ochenta.
Hoy en día están las negociaciones de la segunda parte de Beetlejuice, una de las más grandes franquicias de Burton que hasta una serie animada obtuvo. Tomando en cuenta lo antes mencionado, parece ser una buena idea que Burton deje de hacer cine para niños o malas obras de Broadway reviva a uno de sus personajes más queridos, aunque también puede ser un intento desesperado por recuperar su identidad, como director, ya perdida desde hace más de 10 años, porque todavía falta lo que tiene preparado para esta nueva entrega, no sorprendería a nadie que participase su esposa Helena Bonham Carter y Johnny Deep, ya que con la fijación que tiene con ambos, esto podría poner en riesgo su nuevo proyecto, riesgo de revivir de la tumba al superfantasma y regresarlo a ella de la peor manera.
Los más beneficiados con esta noticia definitivamente son Keaton y Ryder, pues para ellos, participar en la película que sea, que dé de qué hablar, bueno o malo, los regresará a los ojos de la audiencia.
Aunque esta nota pareciera muy negativa no podemos esperar mucho, porque como ya se mencionó, a Tim Burton lo perdimos hace años y se despidió con una película, al parecer, insuperable para el mismo Big Fish, esta tendencia de Hollywood de revivir las fórmulas ya probadas, habla de la falta de ingenio y creatividad que están poniendo tan vulnerable a la industria estadounidense, teniendo como competencia a extranjeros con mayor empuje, iniciativa y deseos de probar que el cine puede seguir evolucionando.
Ahora sólo nos resta esperar si el señor Tim Burton pretende revivir al fantasma que interpretó Keaton, o el fantasma es él mismo y sólo tendremos que decir tres veces Burton para que regrese el director que nos enseñó ese mundo sombrío en el cual él ya no vive más, ahí.