por Fernanda Quevedo | Ago 4, 2014 | Literatura
Era medio día, el sol se encontraba en lo más alto del cielo, el mar estaba en quietud, en el muelle, las lanchas pesqueras reposaban, las hamacas mecían ancianos, un fuerte olor a pescado se fundía en el aire y algunas casitas humildes abrían sus ventanas para...