Zona: Centro Histórico
Dirección: Eje Central esquina Avenida Juárez
Metro: Bellas Artes
Horario: Lunes a Domingo de 9:00 a 23:00 hrs.
Considerada durante varios años el edificio más alto de México, la torre latinoamericana, que durante su construcción rompió varios récords en ingeniería utilizando tecnología mexicana, además de haber resistido sin sufrir daño alguno, los terremotos de 1957 y 1985.
Después de los dos terremotos más fuertes en la Ciudad de México, tanto el Terremoto de 1957 (conocido también como el Terremoto del Ángel), fue un sismo ocurrido a las 02:44 del domingo 28 de julio de 1957. Su epicentro se ubicó cerca del puerto de Acapulco, en la costa del estado de Guerrero y registró una magnitud de 7.7° , aunque el Servicio Geológico de los Estados Unidos lo registró con 7.9°. La zona centro de la República Mexicana fue la más afectada, en especial la Ciudad de México, dejando un saldo de 700 muertos y 2 mil 500 resultaron heridos.
El Terremoto de México de 1985 (fue un sismo ocurrido a las 07:17:47 hora local), el jueves 19 de septiembre de 1985, que alcanzó una magnitud de 8.1 . El epicentro se localizó en el pacífico mexicano, cercano a la desembocadura del río Balsas en la costa del estado de Michoacán, y a 15 kilómetros de profundidad bajo la corteza terrestre.
El sismo tuvo una duración aproximada de más de 2 minutos y afectó en la zona centro, sur y occidente de México, en particular el Distrito Federal, en donde se percibió a las 07:19 hora local. Ha sido el más significativo y mortífero de la historia escrita de México, superando en intensidad y daños al registrado en 1957, que hasta entonces había sido el más notable en la Ciudad de México. Cabe destacar que la réplica acontecida un día después, la noche del 20 de septiembre de 1985, también tuvo gran repercusión para la capital, a la Torre Latinoamericana se le considera uno de los rascacielos más seguros del mundo junto con la Torre Mayor, la Torre Ejecutiva Pemex, el World Trade Center México, la Torre HSBC, el Edificio Reforma Avantel, St. Regis Hotel & Residences y la Torre Insignia.
Ha sido junto con el Edificio Miguel E Abed, Torre Contigo y Edificio El Moro los cuatro únicos edificios en soportar 5 fuertes terremotos en todo el mundo.
La Torre Latinoamericana comenzó su construcción en 1949 para ser concluida 7 años después en 1956, cuando fue inaugurada el 30 de abril de ese año. Durante su construcción se tomaron en cuenta aspectos novedosos para aquella época respecto de su cimentación, ya que al localizarse en una zona sísmica se empleó un sistema de rieles que protegen a la estructura de sufrir daños. Fue así como un año después salió airosa de su primera prueba al resistir ilesa el terremoto de 1957, lo que le valió un reconocimiento internacional como el edificio más alto que había resistido un terremoto de tal magnitud sin sufrir daños. Posteriormente volvió a superar otra prueba en el terremoto de 1985 siendo motivo de orgullo para la ingeniería mexicana.
La dirección de la obra para la construcción de la torre latinoamericana estuvo a cargo del Ingeniero Adolfo Zeevaert, la consultoría en el diseño antisísmico la efectuó el Ingeniero Nathan M. Nwemark y la consultoría en el diseño de la cimentación fue obra del Ingeniero Leonardo Zeevaert. “La edificación de la torre muestra que los arquitectos e ingenieros que participaron en la obra tenían una visión muy amplia y generaron todo un ambiente de tecnología, lo que le permitió ocupar el lugar No. 45 de los edificios más altos del mundo en aquella época”.
Para lograr que la torre latinoamericana tuviera una altura de 181.33m se empleó un material muy ligero y resistente: el acero clasificado con la denominación 47, considerado como el más innovador en aquel momento.
El subsuelo de la Ciudad de México en esta zona se compone en sus sustratos más superficiales por arcilla húmeda; a 33m de profundidad hay una capa de arena resistente, bajo ésta hay nuevamente arcilla y luego otra capa resistente. Antes de iniciar la obra de construcción se realizaron sondeos que extrajeron muestras inalteradas de las diferentes capas, hasta 70m de profundidad. “La innovación más importante de la torre fue el sistema de cimentación, el cual fue tan audaz que no había antecedentes de cómo manejar una cimentación tan profunda en un espacio tan incierto. Se trataba de un terreno realmente peligroso para colocar un edificio de estas características”. Fue necesario clavar 361 pilotes de concreto hasta la primer capa resistente para tener una base sólida para desplantar el edificio integrado a un sistema de flotación.
Esta tecnología fue la primera en su tipo en el mundo. Su eficiencia ha sido reconocida internacionalmente y en mucho ha contribuido a mejorar los reglamentos y sistemas de construcción de nuestra ciudad. Consideremos que un año después de su construcción la torre latinoamericana resultó ilesa del terremoto acaecido el 28 de Julio de 1957 (de 7.7 grados en la escala de Richter). Esta hazaña lo hizo acreedor al premio de la American Association of Construcction and Engieneering, por ser «el edificio más alto que haya soportado una enorme fuerza sísmica”, como atestigua una inscripción en una placa colocada en el vestíbulo. Sin embargo, su prueba más fuerte vino con el terremoto del 19 de Septiembre de 1985 (de 8.1 grados en la escale de Richter), que resistió sin problemas. Otro aspecto a destacar es el sistema de inyección de agua bajo la cimentación, el cual es capaz de provocar empujes diferenciales y así compensar esfuerzos que tiendan a inclinar la estructura. Como la ciudad se hunde más que los edificios cimentados sobre la capa dura, se previó en la losa de la planta baja un sistema para poder bajarla y así evitar un desnivel con la banqueta.
Este rascacielos cuenta con 43 pisos de oficinas y una antena desde donde se transmiten señales de radio y televisión. Asimismo esta torre nos ofrece un mirador en los tres últimos pisos de su estructura donde pueden obtenerse excelentes vistas de la ciudad.
La Torre Latinoamericana puede soportar un terremoto de 8.7 grados en la escala de Richter. El arquitecto Manuel de la Colina diseñó primeramente un edificio de 25 pisos para la compañía de seguros La Latinoamericana. Su idea la transformó Augusto Álvarez quien convenció al director de la Latinoamericana de alcanzar una mayor altura. Así la torre pasó de 44m, a 183m.
En el año 2056 la torre latinoamericana cumplirá su primer centenario de vida.
DATOS CLAVE
Altura- 183 m. TOTAL ( 204,1 m ) ESTRUCTURAL ( 254 m )
Área Total- 27,700 m²
Pisos- 3 niveles subterráneos en los 48 niveles totales.
Estructura de concreto reforzado con:
39,000 metros cúbicos de concreto
3,200 toneladas de acero estructural y de refuerzo
75 amortiguadores sísmicos.
Peso total – 24,100 toneladas
Cristalería total – 27,700 m²
Total de lámina acanalada de aluminio – 3,200 m
Peso total de la instalación sanitaria – 50 t
Total de lámparas de iluminación – 4,000 lámparas
Condición: En Uso.
Rango:
En México: 5º lugar, 2011: 11º lugar
En Latinoamérica: 9º lugar
En el Mundo: 415º lugar
En el Mundo en 1956: 6º lugar
En Ciudad de México: 5º lugar, 2011: 9º lugar
En el Eje Central Lázaro Cárdenas: 1º lugar
En el Centro Histórico de la Ciudad de México: 1º lugar