Hoy comentaré un libro de la autora Rosa Montero, nacida en Madrid.
«Historias de mujeres», nos narra de forma no meramente boigráfica, la vida de dieciséis mujeres, pero de mujeres de la talla de Ágatha Christie, Simón de Beauvior, George Sand, Frida Khalo y Camille Claudel entre otras. En éstas historias, Rosa Montero, intenta entender a la mujer en cuestión y más que ofrecernos un documento de sus vidas como tantos podemos encontrar, hace en verdad una obra literaria llena de aventuras de mujeres malas, sumisas, aterradoras, mujeres con vidas secretas, mujeres solas y débiles y mujeres fuertes; de vidas clandestinas, mujeres liberales, amantes, compañeras, otras intelectuales y de amplio criterio; pero todas, mujeres creativas. En verdad son narraciones llenas de pasión y de una mirada singular.
Como ejemplo, les pongo la historia de Laura Riding intitulado «La más malvada» , en la que Montero inicia su narración con las palabras «Dejémoslo claro… Laura Riding era una bruja…»
Laura Riding fue poeta, tuvo una relación de trece años con el escritor Robert Graves, muy conocido por su libro «Yo, Claudio» que comentaré alguna vez próxima; pero por ahora, regresemos al tema… la historia de Laura Riding, nos muestra a una mujer en extremo fuera de lo común, ella se veía a sí misma como una criatura sobrenatural, lo que la mueve a hacer cosas demasiado excéntricas, como irse a vivir con Graves a su casa, él, ya tenía una esposa y niños, sin embargo para Riding, ésto no era ni problema, ni mucho menos, un menage á trois, sino en una especie de Santa Trinidad, en la que ella y Robert vivían en la parte alta de la casa, ahí, compartían la cama y las letras; mientras la esposa del escritor, vivía en la parte de abajo de la casa, dedicándose a ser una feliz madre, cuidadora de los hijos del autor, y aunque Laura era amante de Robert, ella, tenía a bien llevar al cuello un retrato de Nancy, la esposa de Graves; según nos cuenta Rosa Montero entre otras tantas peripecias demasiado «locas» por decirlo de alguna manera, de la vida de Riding.
Montero nos narra luego, la interesante vida de Aurore Dupin, mejor conocida como George Sand, quien tuvo que cambiar su nombre a uno masculino, para poder dedicarse a escribir y publicar su obra en los tiempos oscuros, donde la mujer no podía ser escritora, ni nada que no fuese mujer de la casa, esposa y madre abnegada…
Nos comparte también, la sórdida y terrible historia de Aurora y Hildegart Rodriguez, quien fue asesinada por su propia madre, la tal Aurora Rodríguez en el año de 1933… o el doloroso drama de Camille Claudel amante de Rodin…
Así como tales relatos, se vienen al modo las vidas en extremo novedosas, perturbadoras, solitarias, secretas y extraordinarias, de las damas que ella selecciona para darle vida a «Historias de mujeres», un libro intenso y brillante en el que tanto hombres como féminas podemos identificarnos en la humanidad de los personajes de carne y hueso que nos regala Rosa Montero.