La memoria obscurece los detalles
de un momento fugaz.
No hay mucho que buscar,
no hay nada más que hacer…
Solamente dejarlo atrás.
Las respuestas están claramente entre líneas,
aprender a descubrirlas
es un buen pasatiempo,
el crucigrama de la vida
te cruza con quienes debes estar.
Caminar sin detenerse
por el camino del nunca y del siempre.
Saber levantar la vista en el momento adecuado,
impulsarse para volar.
Una delgada cuerda une las almas,
a veces uno no se da cuenta
de que alguien está siempre ahí.
A veces uno no se da cuenta,
a veces uno no se da.
Primitivos sentimientos,
deseos imprecisos, incompletos,
pequeños secretos que se revelan
en miradas intensas, en sonrisas perversas.
Sonríeme, mírame más
que quiero saberlo todo,
y déjame contarte
que estoy llegando y me estoy yendo.
Le digo adiós a mis historias increíbles,
a maravillas irrepetibles,
es momento de abandonar a aquel placentero dolor,
de aquellos amores imposibles me despido hoy.
M.A.Z.